Hablemos a principios de año de ese tema que puede hacernos sentir como si viviéramos en una montaña rusa emocional durante semanas (o meses, seamos realistas). Sí, me refiero al ciclo menstrual y las emociones. Porque si 2024 nos dejó algo claro, es que entender nuestro ciclo menstrual no solo es empoderador, sino que puede cambiar la manera en la que vivimos, sentimos y nos relacionamos con nosotras mismas y el mundo.
Así que 2025 puede ser nuestro año para tomar las riendas. ¿Te unes?
Las emociones no son un misterio, son hormonales (en parte)
Si alguna vez te has sentido como una diosa invencible un día y como un desastre emocional al siguiente, no estás loca (lo prometo).
Tus hormonas están jugando un papel importante en tus emociones. Pero antes de echarles toda la culpa, déjame explicarte cómo funcionan:
- Fase folicular (días 1-14, aprox.)
Esta empieza con el primer día de la regla. Los niveles de estrógeno, que son la Beyoncé de las hormonas (empoderadoras y llenas de energía), comienzan a subir. Gracias a esto, solemos sentirnos más optimistas, con ganas de socializar y listas para comernos el mundo. Pero, ojo, porque si el bajón emocional de la regla todavía te persigue, échale un vistazo a este artículo: ¿Por qué nos sentimos tristes durante la regla?. - Ovulación (aproximadamente en el día 14)
Aquí el estrógeno está en su máximo esplendor, y la testosterona se suma al cóctel, haciéndote sentir confiada y poderosa. La creatividad y la libido están por las nubes, así que es un buen momento para enfrentarte a desafíos o conquistar esa meta que llevas posponiendo. - Fase lútea (días 15-28, aprox.)
El cuerpo empieza a producir más progesterona, la hormona de la calma (gracias por tanto, aunque a veces te pases). Esta fase puede ser un remanso de paz, pero si los niveles de progesterona están desajustados o los de estrógeno bajan de golpe, llegan los síntomas del síndrome premenstrual (SPM): irritabilidad, tristeza y ganas de mudarte a una cueva. Aquí es donde entra el Trastorno Disfórico Premenstrual (TDPM), que afecta a algunas mujeres (incluyéndome). Si notas que la última semana antes de la regla es particularmente infernal, es importante que lo sepas: no tienes que aguantarlo en silencio. - Regla o menstruación
Si los niveles hormonales ya eran un drama en la fase lútea, ahora están por los suelos (depende de la mujer). Esto puede llevarte a sentirte agotada, pero también es un buen momento para escuchar a tu cuerpo y darte un respiro.
Para una explicación más detallada de cada fase, no te pierdas este artículo: Fases emocionales del ciclo menstrual.
Ciclo menstrual y emociones: cómo «dominar» estas fases
Aunque las hormonas tienen mucho que decir, no son las únicas protagonistas. La realidad es que el cuerpo de una mujer está en constante cambio y hacer como si no estuviese sucediendo nada es lo peor que podemos hacer.
Para poder empoderarnos, mejorar nuestra salud y aprovechar los cambios que suceden en nuestro organismo, es importante conocer en qué fase estamos, qué esperar y aquello que puede ayudarnos a estar mejor.
Aquí van algunos consejos que aprendí durante 2024 y que me ayudaron a cuidar mi salud hormonal y curiosamente quedarme embarazada cuando dudaba si podría:
- Dieta antiinflamatoria
Si hay algo que mi colon irritable me ha enseñado, es que lo que comemos importa (y mucho). Prioriza alimentos ricos en omega-3, vegetales, frutas y grasas saludables. Y si puedes, di adiós a los ultraprocesados y al azúcar. Tu cuerpo (y tus hormonas) te lo agradecerán. - Ejercicio adaptado al ciclo
No se trata de machacarte en el gimnasio todos los días. Durante la fase folicular y la ovulación, aprovecha la energía para hacer ejercicios intensos. En la fase lútea y durante la regla, opta por yoga o caminatas suaves. - Apoyo emocional y autocuidado
No es un lujo, es una necesidad. Hablar con un terapeuta, escribir en un diario, o simplemente escuchar a tu cuerpo puede marcar una gran diferencia. - Suplementación y adaptógenos
Consulta a un profesional para saber si necesitas suplementos como magnesio, Gaba, vitamina D o vitamina B6 entre otros. Estos pueden ayudarte a manejar el SPM y mantener tus niveles de energía. - Bajar el estrés: Y es que de todos los consejos que podamos seguir… éste se lleva la palma!!! si tu vida está llena de estrés y por tanto cortisol, los pasos que des no tendrán un impacto tan grande como adaptar tu vida para bajar el estrés, ansiedad y pensamientos intrusivos. Si no tienes propósito de año nuevo, te diría que empieces por éste!
Haciendo las paces con nuestras emociones (y aprovechándolas)
Entender tu ciclo menstrual no significa solo sobrevivir a las emociones. Significa aprender a usarlas a tu favor.
2024 fue el año en que aprendí a dejar de pelearme con mis hormonas y empecé a planificar mi vida en torno a ellas: trabajo, proyectos creativos, e incluso relaciones.
Si algo puedo decirte es que este conocimiento puede cambiarte la vida. 2025 puede ser el año en que tú también tomes las riendas, dejando de sentirte como un títere de tus emociones y empezando a ser la directora de tu propia película.
¿Lista para darle un giro a tu ciclo (y a tu vida)? 🌸 ¡Tú puedes, corajud@!